Jugando con fuego. Así es como el gobierno ha asumido la estrategia contra la Pandemia del Covid19 en los últimos dos meses siendo el ministro de economía, Lucas Palacios, quien lidera las aperturas y las irresponsables medidas orientadas a satisfacer a los grupos empresariales con muchas comunas del país en fase 4 y una movilidad que amenaza con poner en riesgo la salud y la vida de los chilenos.
No cabe duda alguna que la mirada «economicista» es la que prevalece en el gobierno de Sebastián Piñera y las advertencias científicas y la protección de la salud de los chilenos es lo menos relevante. Ya han fallecido más de 20.000 personas a causa de la errada estrategia de inmunidad de rebaño que reconoció el mismísimo Jaime Mañalich en junio de este año y de la que el mismo mandatario es responsable por su llamado en invierno al «Retorno Seguro», con dos meses de terror por el impacto del virus.
Lucas Palacios es el ministro estrella del gobierno. Todos los días a través de la red pública de televisión financiada por todos los chilenos un periodista de la misma, Danny Linares, asume el rol de relacionador público del secretario de estado en las aperturas de restaurantes, cines, circos y otras actividades que en casi todas las comunas pueden recibir -según decisión del mismo Lucas Palacios- hasta 100 personas en lugares cerrados y sin exigencias mínimas de ventilación en fase 4.
Matrimonios y eventos con cientos de personas se están realizando en plena Pandemia, incentivado por autoridades irresponsables y medios de comunicación que no asumen el rol de llamar la atención.
El inexistente ministro de salud, Enrique Paris, ya comenzó a anunciar que la segunda ola sería peor que la primera. En el gobierno saben que la irresponsable decisión de Piñera y su equipo económico de acelerar la apertura por la presión de los grandes empresarios generará un brote que podría ser muy complejo, más aún sin sistema de trazabilidad instalado y sólo con el macabro «ofertón» -al más puro estilo Mañalich- de aumentar en más de 1000 camas UCI y ventiladores, ante el escenario que se avecina.
Los negocios primero es la consigna y cuando los miles de chilenos que se contagien, los que mueran da lo mismo… Lo relevante es que las grandes empresas recuperen sus ganancias en las planillas de resultados financieros y el Fisco no se endeude, ya que los grandes grupos empresariales no pueden exponerse al incremento del costo del crédito por el riesgo país en los mercados de capitales.
La mirada egoísta de la élite se refleja en que Piñera incluso se dio el lujo de decir ayer en una conferencia de prensa que el impuesto que se aplicará a los chilenos que hagan el retiro de su 10% de los fondos de pensiones será para financiar las vacunas que se aplicarían el próximo año…