Ayer salió a la defensa de su antecesor, Jaime Mañalich, y a mentir en forma evidente en cuanto a la tasa de mortalidad del virus Covid19 en Chile, algo que los medios de comunicación oficialistas no cuestionaron. El ministro Enrique Paris indicó a «La Tercera» que «tenemos una de las letalidades más bajas» siendo que el país está entre los cinco primeros en cuanto a los muertos por cada 100 mil habitantes.
Pero hoy se superó. En medio de las críticas hacia el gobierno que está siendo seriamente cuestionado por gran parte de la población por sus insuficientes e ineficientes medidas -incluso su propio sector político-, el mediático ministro de salud, Enrique Paris, se puso a tono con el segundo piso de La Moneda. Así cuestionó las manifestaciones a favor del proyecto de retiro del 10% y no sólo se centró en los actos vandálicos de la última jornada. Sus declaraciones estaban direccionadas a quienes pacíficamente se expresaron la última noche tocando caceloras y bajo el argumento del riesgo sanitario.
Citando al ex presidente Arturo Alessandri en una frase casi bíblica -«sólo el amor es profundo…»- el ministro mostró su lado más político y ajeno a la realidad de gran parte del país. Al más puro estilo Mañalich utilizó todos sus recursos mediáticos para criminalizar la protesta deslizando incluso la idea de una conspiración en contra del gobierno. Llamó la atención que Paris no aludió en caso alguno a las urgentes necesidades de la población en cuanto al acceso a la alimentación. Paris así se vio esta mañana más como un ministro del área política del gobierno y no en su rol sanitario.
Los números de la Pandemia para el gobierno son cada vez mejores. Menos casos y una caída de contagios pero lo que el ministro disimuló es el crecimiento en el número de fallecidos en la última jornada, ya que en el cuestionado informe diario se agregaron otros 117 muertos, llegando a un total (con PCR positivos) a 7.186 siendo necesario recordar que los fallecidos suman -según el DEIS- a 11.227.