Han transcurrido casi seis meses desde el primer caso de Covid19 en Chile. Nadie se imaginó que el país llegaría estar en los “top ten” en el mundo en número de contagios -409.974- y en muertos que en total superan los 15.500.
Por ello llamó la atención las reflexiones del subsecretario de redes asistenciales, Arturo Zúñiga, en una reivindicativa entrevista publicada en “La Tercera”. Ninguna autocrítica y la arrogancia que ha caracterizado al funcionario se concentran en una sola frase: “Había críticas no constructivas, esperando que se fallara, que no hubiera ventiladores mecánicos. Hubo quienes querían que falláramos en esta pandemia, y aquí no se trata de que falle un gobierno. Si hubiésemos fallado ante esta pandemia, falla un país entero. Los pacientes que se enferman son tanto de derecha como de izquierda”.
Zúñiga no asume que el país falló en enfrentar el Covid19 ya que la estrategia nunca se tuvo clara y peor aún hasta hoy la autoridad no ha indicado cómo se definió a principios de año que se iba a hacer ante los contagios. Todo se centró en los ventiladores mecánicos y tanto el subsecretario como el ex ministro de salud, Jaime Mañalich, lo asumieron como un fetiche. De confinamiento, testeo, trasabilidad y aislamiento recién se vino a hablar en junio después que miles de personas se contagiaron y varios miles murieron. Mañalich había abandonado el barco y el nuevo titular de la cartera, Enrique Paris, asumía un rol de relacionador público más que líder del proceso para enfrentar la Pandemia, preocupado más de lo que los medios digan de él y cumplir con mucha fidelidad lo que le impone el segundo piso de La Moneda.
Lo único que los chilenos escucharon del ex ministro Mañalich fue que el país podría enfrentar un peack de 400 mil contagios -marzo de 2020. Luego todo se enfocó en los ventiladores mecánicos con la puesta en escena del poderoso presidente de la CPC, Juan Sutil.
La estrategia si la había era la “inmunidad de rebaño” a la que expresamente se refirió el ministro y la subsecretaria de salud Paula Daza aun cuando desde el gobierno lo han desmentido a pesar de los registros de las declaraciones de las autoridades en el mes de abril. Las cuarentenas eran inviables para Mañalich y el gobierno creyendo que los ventiladores mecánicos permitirían tal vez salvar miles de vidas pero la realidad mostró que a pesar de contar con dichos implementos el país acumula más de 15.500 fallecidos y se empina entre los 5 países del mundo con mayor número de bajas por millón de habitantes.
Seis meses han transcurrido y recién el foco está en la trasabilidad y el aislamiento, lo que es muy complejo en una estructura administrativa que ha hecho agua desde el mes de julio cuando la Pandemia comenzó a descender y se instaló en una meseta ya endémica de casi 2.000 casos diarios.
El gobierno sigue en la lógica de la apertura llevando a las comunas del barrio alto a partir del próximo miércoles a la Fase 3, para abrir más comercios y los restaurantes.
En las últimas 24 horas se registraron 1.966 casos nuevos, con 16.146 casos activos y 409.974 contagios desde que comenzó la pandemia.
Los fallecidos, en tanto, ascendieron a 63 personas y en total ya se registran 11.244 con examen PCR y en total superan los 15.500.