El presidente de la Corte Suprema, Hugo Dolmestch, realizó este martes 2 de enero un encuentro de despedida con los periodistas acreditados en el Palacio de Tribunales, a menos de una semana de culminar su período como máxima autoridad del Poder Judicial.
«Yo estoy muy contento, no solo por lo que se ha hecho sino por la colaboración de ustedes, con la relación que hemos tenido durante estos dos años que ha sido muy fraternal y muy cercana. Quiero darles las gracias por lo que han hecho y muchas gracias por lo que van a seguir haciendo y estoy muy contentos de haber trabajado con ustedes», dijo la autoridad a los representantes de los medios de comunicación.
«Yo he hecho un balance, me siento satisfecho y contento. Satisfecho por que he podido lograr lo que yo buenamente creí que podía hacer. En segundo lugar, los resultados que yo advierto en ese aspecto son halagüeños de tal forma que por eso me siento contento. Por supuesto que todo pudo haber sido mejor, dificultades claro que hubo, malos ratos también, trabajo excesivo también, pero es lo que yo pensé que debías que hacer, por lo tanto ese es mi balance, Me voy satisfecho y contento», dijo a modo de balance.
Temas de actualidad
Al ser consultado por los temas en deuda de su mandato, Hugo Dolmestch mencionó la situación de los niños, niñas y adolescentes en riesgo social, al punto que anunció que el Pleno del máximo tribunal le pidió hacer una presentación por escrito a la Mandataria Michelle Bachelet para manifestar la preocupación frente al tema.
«Hay algo que a nosotros nos tiene preocupados y que ella lo sabe y se lo vamos a hacer saber también por escrito Es más bien una preocupación nuestra en relación la legislación actual y los proyectos que se envían, que no tienen la tramitación que requiere, y que dicen relación con los menores y eso nos afecta de sobremanera. Si nosotros no sabemos cuál es la capacidad -por ejemplo- de recepción en las casas de residencias nuestros jueces tienen dificultades para enviar a los menores a un tratamiento determinado o un régimen determinado. Entonces hemos sabido que en la práctica se están produciendo – por razones presupuestarias- alguna limitación en cuanto a los tratamientos en algunas residencias. Hay también, tengo entendido, cierres de residencias por lo que se está restringiendo el lugar donde los niños puedan resolver sus dificultades y nuestros jueces puedan ver ejecutadas sus decisiones y eso nos tiene preocupados y se lo vamos a hacer saber formalmente en el transcurso de esta semana. Estas cosas nos afectan, porque los que toman las decisiones son los jueces y la administración tiene el deber de cumplir con las decisiones judiciales», informó
«Si nosotros no sabemos con qué se cuenta, difícilmente podemos controlar y direccionar las decisiones jurisdiccionales. Entonces, nosotros queremos estar al tanto de eso, queremos saber lo que ocurre, lo que el país es capaz de hacer y queremos estar más cerca de las decisiones gubernamentales y legislativas.
Estas cosas se resuelven cuando todos los actores se ponen de acuerdo y se trancan o se topan cuando los recursos económicos son insuficientes y nosotros estamos muy lejos de ese manejo. No conocemos esa realidad y comprendemos también esas limitaciones, pero por lo menos expresamos nuestra preocupación, nuestra dolor anticipado de que hay algo que no vamos a poder resolver y yo creo que los demás poderes del Estado podrían tener alguna reacción un poco más abierta y buscar los recursos. Los menores requieren y necesitan que nosotros los atendamos, no solo los jueces sino que el país, toda la comunidad y para eso necesitamos medios. Hemos sabido que no solo no se están aumentando, sino se están restringiendo y puede ser un problema de políticas equivocada o no, pero si es verdad se pueda rectificar. Es muy preocupante», estableció la autoridad.
Al ser consultado sobre qué mea culpa hace en este sentido, señaló como deuda una presencia mas efectiva en los hogares del Servicio Nacional de Menores. «Nosotros, tal vez, siempre pudimos haber advertido las dificultades y para eso tenemos dudas que a lo mejor no se realizaron las visitas o el seguimiento que nosotros debimos haber hecho por la vía de los tribunales de Familia o de Garantía. Tal vez por razones de sobrecarga también, pero si usted me habla de mea culpa, tal vez puede haber existido también un poquitito de falta de decisión o de alguna determinación en el momento y en eso nosotros debemos tomar conciencia y aportar de nuestra parte lo que corresponde. Nosotros estamos en perfecta armonía con los jueces, conversamos con ellos y les damos instrucciones en el sentido que tengan mayor vista hacia la ejecución, el cumplimiento y eso lo controlen. Para eso están obligados a hacer visitas», concluyó.
Además, el ministro fue consultado por otros temas de actualidad. Se le preguntó por un instructivo del Fiscal Nacional del Ministerio Público dado a conocer la semana pasada en que se restringiría los contactos de fiscales y periodistas. «Nosotros hemos ido desde el secreto del sumario, de la distancia absoluta con la prensa hasta la apertura. Yo creo que todos estos instructivos no pretenden de modo alguno volver al secreto del sumario que es una especie de ley mordaza como dicen algunos, yo creo sencillamente que se trata de que los fiscales tengan la debida prudencia como para hacer saber a través de la prensa lo que corresponda, porque de todas maneras hay trámites o diligencias que por un tiempo tienen el carácter de secreto y eso no es posible que se esté dando a conocer. No lo veo yo como una limitación a los derechos de la gente y de la prensa, pero la prudencia nos indican que hay cosas que no pueden ser transmitidas durante el periodo de investigación», estableció.
Sobre la presencia de magistrados en redes sociales y las opiniones que pueden entregar a través de estas plataformas, el presidente de la Corte Suprema opinó que «Ni los investigadores ni los jueces tenemos la facultad o el derecho de dar opiniones anticipadas . Nuestras opiniones o decisiones las damos a través de las sentencias y no por los comentarios que se pueden hacer, el juez no le está permitido por vía de Twitter o comentarios públicos hacer calificaciones de orden jurídico o incluso ideológicos. Eso no lo puede hacer un juez ni tampoco un investigador».
Por último, la máxima autoridad del Poder Judicial se refirió al colapso identificado por la Contraloría General de la República en la Corporación de Asistencia Judicial.
«El problema de la Corporación ha sido un problema desde siempre y es la falta absoluta de recursos. Los abogados que ahí trabajan deben ganar muy poco y trabajan mediodía y tenemos problemas por ejemplo con las prácticas, ya que está colapsado. Cada día aumenta más la diferencia entre el tratamiento de la ayuda que el Estado le da a la gente en materia civil con la que le da en materia penal que funciona bastante más controlado y mejor. Creo yo que hacen lo que más pueden y tienen dificultades económicas, los locales donde atienden, pocos funcionarios, y pocos abogados rentados. El camino es el mismo de todo: reclamar ante el poder Ejecutivo y Legislativo que puedan crear mas cargos y resolver algunas dificultades internas. Creo que solo eso es falta de recursos. La gente que ahí trabaja es gente honesta y que se entrega al cien por ciento, pero no dan más».
Finalmente señaló que «la relación directa con la Presidenta Bachelet ha sido de un trato extraordinario . Hubo una pequeña inflexión en las relaciones, que se manifestó en una carta, pero nunca fueron malas. El resultado ha sido extraordinario».
Dj