El presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Juan Sutil, indicó en entrevista esta mañana al programa de Canal 13 Mesa Central, que el Estado y las municipalidades no producen un peso para el país, aludiendo a que los empresarios son los llamados a enfrentar la Pandemia del Covid19.
Más aún el dirigrente de los grandes empresarios añadió que era entendible que las Isapre aumentaran los planes por el incremento en sus costos y que es valiosa la postergación que lograron con acuerdo del gobierno. Incluso, Sutil sostuvo que trabaja diariamente junto al presidente de la república, Sebastián Piñera, en un claro reconocimiento de la sensación de cogobierno entre el Ejecutivo y los grupos empresariales.
La noche anterior Juan Sutil había sido protagonista al anunciar el aporte de los grupos empresariales de cinco mil millones de pesos a la Teletón, provocando el júbilo del animador Mario Kreutzberger y de los twitteros de derecha en la red social. A lo anterior, el presidente de la SOFOFA, Bernardo Larraín Matte, indicó que la «obra» de ayuda a los niños y personas discapacitadas debía seguir en manos de los privados ya que si el Estado se hiciera cargo sería un error y se perderían los aportes.

Pero la arrogancia de los líderes empresariales y su denostación al Estado y las municipalidades se enfrenta a una cruda realidad: los miles de despidos que se llevaron a cabo durante los últimos días y los acuerdos impuestos por muchos empleadores de suspensión de relación laboral sin pago de remuneraciones, siguiendo las instrucciones del Dictamen de la Dirección del Trabajo y que aún sigue vigentes.
Así no sólo el «café» a que alude el ministro Briones procedieron a despidos masivos por el «regalo» que el gobierno les dio a las grandes empresas al demorar la publicación de la tan ansiada ley y abrirle la «ventana» para proceder a reducir a destajo personal por las causales «caso fortuito» y «necesidades de la empresa». A lo anterior, se añade que los pactos de reducción de jornada recién aplicarían a partir del primero de mayo si es que se firman en abril y los casos de trabajadores en zonas de cuarentena sólo alcanzan a un 15% del total de la fuerza laboral.
Y en este clima, el sector empresarial mostró el garrote en dos sectores que durante la semana poco hicieron frente a la situación extrema en que se encuentra el país -y el mundo- por la pandemia Covid19.
Las Isapre anunciaron alzas promedio de un 4.5%. Una noticia sin duda sorprendente considerando que casi tres millones de afiliados verán como suben las primas que pagan a dichas aseguradoras siendo que sus ingresos se irán al suelo o se reducirán. En una declaración muy poco feliz -otra más- el presidente Piñera anunció como gran noticia que el alza comenzará en noviembre validando así la medida del sector y en un claro apoyo la medida, que este domingo su estrecho colaborador Juan Sutil ratificaría.
Los bancos fueron objeto de las críticas por su renuencia a financiar a las PYMES, a pesar de que el Banco Central redujo las tasas anuales al 0.5% y la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) modificó las reglas sobre provisiones. Las entidades financieras mantuvieron sus estándares de evaluación de riesgo y niegan créditos a las empresa medianas y pequeñas. Pero Juan Sutil fue más allá y en una declaración destemplada en canal 13 indicó que no es posible que los bancos adopten medidas para rebajar los intereses porque ello podría constituir un caso de colusión.
Ante la presión de parte de la opinión pública, el gobierno indicó que no puede hacer nada y que operan las leyes de mercado, haciéndose eco de lo señalado hace semanas por el ministro de hacienda, Ignacio Briones, de que una parte significativa de las empresas quebrará.