El fútbol aguantó lo que pudo con partidos en estadios vacíos, pero el Coronavirus ha sido un enemigo demasiado poderoso, el único que logró detener al deporte rey de manera global, algo que solamente lo lograron guerras mundiales.
Pero más allá de su paralización, el impacto económico en nuestra actividad esta sacando ronchas. Unión Española en acuerdo con su plantel decidió rebajar los sueldos más altos del plantel y pagar dichas sumas en adelante. Audax Italiano se acogió derechamente a la Ley de Protección al empleo. Colo Colo desesperadamente intenta un gesto de sus futbolistas. La Universidad de Chile en el mismo camino. Pero lo más comentado ha sido lo que se vive en Temuco. En una las ciudades mas afectadas por la pandemia, los dueños del heredero de Green Cross, encabezados por Marcelo Salas, decididos a poder enfrentar la debacle económica también realizan esfuerzos para que su plantel asuma la situación que vivimos.
Cuando el mundo entero, se aplican las mismas medidas. En la Premier League, en España, en Mexico, Bolivia, Perú, Italia. Nadie se escapa.
Entonces, ¿Pareciera ser que la actuación del SIFUP es evidentemente sesgada respecto de Deportes Temuco? Claro que si. Quizás alguna pasada de cuenta con Salas. Vaya a saber uno. Si nuestro fútbol esta lleno de revanchismos.
Si esta Pandemia viene exigiendo a la humanidad todo un replanteamiento de casi toda la sociedad. Se habla de repensar la economía, porque es increíble que tanta gente tenga problemas para sostenerse si no trabaja un par de días. Se habla de usar mejor la tecnología, pues pese a tanto big-data y a tanta Inteligencia Artificial no se pudo prever la expansión del virus. Y, lógicamente, se dice que también hay que replantarse el papel del deporte profesional. Creo que el deporte mantendrá su función social como enorme pasatiempo internacional y como una fuente de historias de superación. Pero deberán replantearse ciertas cosas: ¿tiene sentido que un jugador reciba ingresos superlativos?
Los libremercadistas y egoístas de siempre dirán: por supuesto. Creemos que el fútbol no está ajeno a los grandes cambios. Mejores condiciones para todo. Repartición igualitaria de los derechos del fútbol televisado, mayor acción de los dirigentes que sentados en Quilín ven pasar una oportunidad de oro de seguir en el camino que nuestra nación viene reclamando desde el 18-10.
Sin embargo, con los mismos de siempre. Si aquellos que avalaron y azuzaron al delincuente de Jadue poco o nada se puede esperar.
Por Cristián Ramírez Tagle